Hola muy buenas, qué tal! Soy Mike, y aquí estoy de nuevo para ayudarte a ti, en tu crecimiento personal & financiero.
Hoy vamos a hablar sobre las deudas, y cómo podemos salir de ellas lo más rápido posible. En concreto explicaré 3 métodos diferentes para conseguirlo.
LAS DEUDAS
Tarjetas de crédito, préstamos para la reforma de la cocina, el coche, los estudios... o la propia hipoteca. Hoy en día es difícil no estar endeudado. Es más, no es difícil encontrar hogares o familias que tengan, no una, sino múltiples deudas o préstamos a la vez. Y es que meterse en un préstamo es bastante fácil hoy en día… pero luego cuesta horrores salir, verdad?
Las deudas, sobretodo las de consumo, son muy nefastas para nuestras finanzas personales, son muy dañinas, porque:
- Merma tu capacidad de ahorro.
- Todas ellas vienen con intereses que hace que acabes pagando mucho más de lo que has pedido.
Y cuanto más tiempo tardamos en pagar un préstamo, más intereses acabamos pagando. No es lo mismo pagar un préstamo de 5 mil euros con un tipo de interés al 5% en 3 años que en 10. A 3 años, nos sale una cuota a pagar de 149€ al mes y al final del préstamo habremos pagado 394€ en intereses. Sin embargo a 10 años, la cuota nos sale más baja, 53€, pero en total habremos pagado 1.363€ en intereses!
Por tanto, ¿cómo podemos pagar más rápido nuestras deudas para acabar pagando menos intereses, y quedar limpio de deudas obviamente?
A continuación vamos a ver 3 métodos prácticos para conseguirlo, y se llaman:
- Copitos de nieve
- Avalancha
- Bola de nieve
MÉTODO COPITO DE NIEVE
Empezamos por el menos conocido, el método copitos de nieve.
Este método consiste en utilizar cualquier dinero extra que entre a casa para amortizar deuda. De dinero extra me refiero a dinero regalado en cumpleaños, algún trabajillo extra, cosas que vendemos por wallapop, en definitiva cualquier dinero que entre a casa aparte de la nómina.
Se llama copito de nieve por lo aleatorio que es, igual que cuando está nevando y caen los copitos de nieve. Con este método iremos reduciendo nuestra deuda antes de tiempo aprovechando estos pagos “inesperado”.
Hay 2 maneras de ejecutar este método:
Utilizar el dinero extra en amortizar siempre un mismo préstamo, el que más rabia te dé, hasta que esté saldado. O asignar a cada préstamo una procedencia. Por ejemplo, el dinero extra que me gano los fines de semana arbitrando, los utilizo para el préstamo del coche. Y cada vez que vendo algo por wallapop o internet, va para la tarjeta de crédito. ¿Me sigues, no?
MÉTODO AVALANCHA
El método avalancha es un método muy eficaz para quitarnos todas las deudas de encima, y desde el punto de vista matemático es probablemente el que tenga más sentido. Te explico cómo funciona.
El método consiste en:
Hacer una lista de todos los préstamos que tengamos. Después, los ordenas por el tipo de interés, siendo el primero el que tenga el tipo de interés más alto. En este ejemplo, el que tiene un tipo de interés más alto es la tarjeta de crédito, un 17%, casi nada!
Lo siguiente es conseguir ahorrar, a lo mejor ya estamos ahorrando 50, 100€ cada mes, perfecto. Si no, habrá que buscar por donde podemos recortar gastos para conseguir ahorrar algo. Algunas ideas: A lo mejor quitando el café del descanso, la suscripción a netflix, pedir menos al Goiko’s...
En cuanto a los préstamos, de entrada realizamos el pago mínimo habitual de cada mes en cada préstamo. Aquí pagamos 130€, aquí 250 y aquí 90. Entonces, esos ahorros que conseguimos apartar cada mes, imaginemos que son 100€, los utilizamos para amortizar el préstamo con el tipo de interés más alto. Esto lo repetimos cada mes hasta pagar la totalidad del capital pendiente del primer préstamo.
Genial! ¡Nos hemos librado de un préstamo!
Pero ahora viene lo verdaderamente interesante!
El próximo mes nos enfocamos en el siguiente préstamo con mayor interés, que en nuestro ejemplo es el préstamo del coche. Pero no vamos a amortizar 100€, sino que vamos a amortizar 190€! Los 100€ de los ahorros + 90€ de la cuota de la tarjeta de crédito que ya hemos saldado!
¿Ves la jugada, no? A medida que vas liquidando préstamos, vas a poder amortizar más. Y a medida que te vas quitando préstamos de encima, el poder de amortización es mayor. De ahí el nombre de avalancha!
La mayor ventaja de este método, por eso, es que te quitas primero los préstamos más caros, con tipos de interés altos. Por tanto, en el total acabas pagando muchos menos intereses.
MÉTODO BOLA DE NIEVE
El tercer método se llama Bola de nieve. Este método se asemeja al de avalancha con una diferencia. En vez de ordenar los préstamos por el tipo de interés más alto, se ordena por el capital pendiente más bajo.
En nuestro ejemplo anterior, comenzaríamos amortizando la reforma del baño, ya que tiene un capital pendiente de 3000€.
Después la tarjeta de crédito y por último el coche. El sistema es igual que en la avalancha, primero vamos amortizando todo lo que podamos en el primer préstamo, y una vez saldado, pasamos al siguiente préstamo.
¿La mayor virtud de este método?
Pues que vas a tardar menos en notar que tus préstamos se van reduciendo. Es el factor psicológico que hace que este método sea muy interesante y eficaz.
Esos quick wins, los pequeños logros, llegan antes y es un chute de motivación para seguir pagando la deuda más rápido. Cada vez que un préstamo se liquida por completo, esa motivación se va acumulando, igual que una bola de nieve.
CONCLUSIÓN
¿Qué método es mejor? Los 3 que hemos visto hoy son similares, y no hay ninguno mejor que otro, dependerá un poco de tus preferencias.
Como ya he dicho antes, desde el punto de vista financiero, puede que el método avalancha te permita ahorrar el pago de más intereses.
Pero a favor de la bola de nieve está el factor psicológico, que es igual de importante para mantenerse motivado en la dura tarea de pagar nuestra deudas en el menor tiempo posible.
El método copitos de nieve quizás sea el menos metódico, pero comparte el mismo principio de utilizar cualquier dinero sobrante en amortizar nuestras deudas.
Al final, lo más importante es tener la voluntad de quitarnos las deudas lo más rápido posible, siendo consciente que si no aceleramos este proceso, acabaremos pagando una burrada en intereses y mientras duren los préstamos, nuestro poder adquisitivo y de ahorro queda limitado.
Si te fijas, en mis ejemplos no he mencionado las hipotecas, que es otro préstamo bastante habitual en cualquier hogar.
No lo he mencionado a propósito porque de entrada, en cualquiera de los métodos que hemos visto, siempre sería el último préstamo a amortizar:
- Suele tener el tipo de interés más bajo
- El capital pendiente suele ser muchísimo mayor que el resto
Es probablemente la única deuda que no vería mal mantener durante un largo periodo de tiempo. Es “dinero barato”, y al final es la vivienda donde estás viviendo, es como pagar un alquiler. Lo que hay que evitar sobretodo, son las deudas de consumo, vamos, las que hemos visto antes. Si se pueden evitar de inicio, mejor. Pero si no hay “más remedio”, pues al menos intentar salir de ellas lo más rápido posible siguiendo cualquier de los métodos que hemos visto.
¿Qué método te gusta más? ¿Sigues un método distinto que no hayamos contado hoy? Deja tu comentario en la sección de comentarios.
Comentarios
Publicar un comentario